La Organización Mundial de la Salud (OMS) presentó la 13ª actualización de las directrices sobre los tratamientos contra el Covid-19, que incluyen recomendaciones revisadas para los pacientes que no presentan un cuadro grave y las tasas de riesgo del ingreso hospitalario.
Según la OMS, las variantes actuales del virus tienden a causar un cuadro menos peligroso y además los niveles de inmunidad son más elevados como consecuencia de la vacunación, lo que ha reducido el riesgo de enfermedad grave y fallecimiento para la mayoría de los pacientes.
Esta actualización contempla una nueva categoría de “riesgo moderado”, que incluye a las personas que antes se consideraban de alto riesgo, como adultos mayores y/o con afecciones crónicas, discapacidad y comorbilidades de las enfermedades crónicas.
Las estimaciones de riesgo actualizadas ayudarán a los profesionales de la salud a identificar a las personas con un riesgo de ingreso hospitalario alto, moderado o bajo, y a adaptar el tratamiento de acuerdo con las directrices de la OMS:
• Alto: las personas inmunodeprimidas siguen teniendo un mayor riesgo si contraen el Covid-19, con una tasa de hospitalización estimada del 6%.
• Moderado: las personas mayores de 65 años, quienes tengan obesidad, diabetes y/o afecciones crónicas, en particular la enfermedad pulmonar obstructiva crónica o una enfermedad renal o hepática, cáncer, las personas con discapacidad y/o con comorbilidades de las enfermedades crónicas tienen un riesgo moderado, con una tasa de hospitalización estimada del 3%.
• Bajo: las personas que no pertenezcan a las categorías de riesgo alto o moderado tienen un riesgo de hospitalización bajo (0,5%). La mayoría de la población pertenece a este segmento.
Revisión de los tratamientos
La OMS sigue recomendando encarecidamente la combinación de nirmatrelvir y ritonavir (también conocido por su nombre comercial Paxlovid) para las personas con riesgo de hospitalización alto y moderado.
Esta mezcla, que fue sugerida por la OMS por primera vez en abril de 2022, aún se considera la mejor opción para la mayoría de los pacientes que cumplen con los requisitos, en vista de sus beneficios terapéuticos, la facilidad de administración y que existen menos motivos de preocupación acerca de posibles daños.
Si dicha combinación no está disponible para los pacientes con riesgo de hospitalización alto, la OMS indica recurrir en su lugar a molnupiravir o a remdesivir. Para personas con riesgo moderado, se desaconseja su uso, ya que se considera que los daños potenciales superan los beneficios.
Para quienes presenten un riesgo de hospitalización bajo, la OMS no recomienda ningún tratamiento antivírico. Síntomas como la fiebre y el dolor pueden seguir tratándose con analgésicos, como el paracetamol.