Científicos pronostican que la carga de la enfermedad del hígado graso no alcohólico (NAFLD) seguirá aumentando, según una investigación presentada en The Liver Meeting, la reunión anual de la Asociación Estadounidense para el Estudio de las Enfermedades del Hígado.
El Dr. Phuc Le y sus colegas de la Clínica Cleveland desarrollaron un modelo de transición estatal basado en agentes que incluía dos componentes con un ciclo anual, simulando la población de Estados Unidos desde 2000, basándose en datos del censo y rastreando la evolución natural.
La validación del modelo demostró una estrecha coincidencia entre los resultados previstos entre 2000 y 2018 y los datos publicados.
Los investigadores encontraron que el modelo predijo un aumento constante en la prevalencia de NAFLD entre los adultos estadounidenses, de 27,8% en 2020 a 34,3% en 2050.
Se espera que la proporción de esteatohepatitis no alcohólica aumente del 20,0 al 21,8% entre los casos de NAFLD.
Para las personas de 18 a 29 años, la prevalencia debería permanecer relativamente estable, pero se proyectan aumentos significativos en otros grupos de edad.
De 2020 a 2050, se prevé que la proporción de pacientes con EHGNA que desarrollen cirrosis aumente del 1,9 al 3,1%.
Se espera que las muertes relacionadas con el hígado aumenten del 0,4 al 1,0% de todas las muertes.
Se prevé que la NAFLD causará 19.300 nuevos casos de carcinoma hepatocelular para 2050 y 4.200 nuevos casos de trasplante de hígado por año, lo que representa un aumento significativo de 10.400 y 1.700 casos, respectivamente, en 2020.
“Con el aumento de las tasas de diabetes y obesidad, se espera que la enfermedad hepática esteatósica asociada a la disfunción metabólica se convierta en la principal razón para los trasplantes de hígado en los Estados Unidos”, advirtió Le en un comunicado.