Un estudio detecta cómo una variante genética modifica el efecto de la estimulación cerebral en la memoria

El gen del factor neurotrófico derivado del cerebro (BDNF, en inglés) está asociado a varios procesos relacionados con la memoria y la plasticidad cerebral. Ahora, un nuevo estudio revela que en las personas dotadas de la variante genética Val/Val para el gen BDNF es más fácil modular el rendimiento cognitivo mediante la estimulación magnética transcraneal (EMT).

El artículo, publicado en la revista Scientific Reports, está liderado por el investigador Kilian Abellaneda, miembro del Barcelona Brain Stimulation Lab (BBSLab), que coordina David Bartrés-Faz, profesor de la Facultad de Medicina y Ciencias de la Salud e investigador del Instituto de Neurociencias de la Universidad de Barcelona (UBNeuro), así como miembro del Instituto de Investigaciones Biomédicas August Pi i Sunyer (IDIBAPS). En el trabajo también participan equipos del Hospital Clínico de Barcelona, el Instituto Guttmann, la Escuela de Medicina de Harvard (Estados Unidos), y las universidades de Siena, Trento y La Sapienza de Roma (Italia), entre otras instituciones.

La EMT es una técnica no invasiva que ayuda a conocer mejor el funcionamiento cerebral y tiene múltiples aplicaciones en el estudio de los procesos cognitivos y la rehabilitación neuropsicológica. En el marco del trabajo, mediante técnicas de neuroimagen funcional, el equipo pudo comprobar que bajo los efectos de la neuroestimulación los sujetos dotados de la variante alélica Val/Val mostraban mayor actividad cerebral en procesos en los que se usa la memoria —en particular, en las regiones cerebrales contralaterales a la estimulación—, una característica que se relacionaría con los procesos de compensación funcional en el cerebro.

“Consideramos que los datos obtenidos en este estudio aportan información relevante sobre los mecanismos neurobiológicos relacionados con los procesos de neuroplasticidad que explican las diferencias individuales respecto a cómo la estimulación afecta a nivel cognitivo. Así, los nuevos resultados podrían ser de interés para diseñar futuras intervenciones en las que se priorice el grado máximo de personalización”, comenta Kilian Abellaneda, miembro del Departamento de Medicina de la UB y del IDIBAPS.

Este estudio forma parte de una colaboración europea que se enmarca en el proyecto Pharmacog, en el ámbito de las enfermedades neurodegenerativas. Uno de los objetivos de este proyecto es desarrollar plataformas experimentales para ensayar en humanos la modificación controlada de las funciones cognitivas y los procesos cerebrales subyacentes, con la perspectiva de poder utilizarlos posteriormente para estudiar el efecto de futuros fármacos en las primeras etapas de su desarrollo.

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