En los últimos años se ha impulsado el desarrollo tecnológico para el área de salud, creando la modalidad de telemedicina y la digitalización de datos médicos. Con la pandemia de Covid-19, este proceso se ha acelerado y en Chile distintos laboratorios y recintos médicos han adoptado la tecnología para cumplir con su labor.
La interoperabilidad y los datos en la nube son dos factores claves en la evolución de la salud conectada. Alex Moran, socio global de Everis y responsable del sector de salud, sostiene que “la pandemia ha acelerado a adopción de la nube y la digitalización de la información en la medida en que es la única respuesta tecnológica a dos parámetros que han sido críticos estos meses: velocidad de despliegue y escalabilidad”.
Algunas instituciones han comenzado a implementar soluciones tecnológicas para continuar con el servicio de salud para sus pacientes a pesar del confinamiento. Un ejemplo de ello, es la Clínica Universidad de los Andes que desde 2014 integró un Registro Médico Clínico donde se pueden guardar datos como muestras de sangre, imágenes, valores e informes de los resultados.
Conscientes de que las tecnologías de la información formarían parte de la red de salud, Pablo Valdés, subdirector médico de la clínica, comenta que “usar la nube para la visualización de exámenes de laboratorios e imágenes, pagar las cuentas de hospitalización, recibir recetas y órdenes médicas y solicitar hora para servicios clínicos es el estándar de hoy”.
La Clínica Alemana está en proceso de transformación digital donde reformularán los puntos de contacto hacia el paciente, comprendiendo a este en su omnicanalidad. Desde la clínica aseguran que la digitalización va más allá de la telemedicina y que involucra la creación de una Ficha Clínica Electrónica, digitalizando los documentos que normalmente eran impresos a los pacientes, como recetas, órdenes de exámenes y certificados, entre otros.
Una de las preocupaciones de aplicar esta modalidad digital es la seguridad de los datos de los pacientes para que estos no sean vulnerados. Cherie Gutiérrez, subdirectora médica de Clínica Dávila, asegura que su Registro Clínico Electrónico cuenta con “altos niveles de seguridad por la información sensible que contiene y garantiza una actualización permanente de los datos del paciente.
Por otro lado, dentro de las ventajas de la salud digital está el ahorro de tiempo, autonomía y mejorar la calidad de respuesta al paciente. El mantener datos digitalizados en la nube “permite crear una historia clínica que permite ir viendo la evolución y controles del paciente”, asegura Gutiérrez.
Respecto a la telemedicina, Clínica Indisa ha dado un gran salto durante el último año con cerca de 33 mil consultas online. “es una solución robusta que ha resultado ser muy exitosa por concentrar un alto interés de nuestros pacientes, logrando consolidarse hoy como una de las prestaciones más importantes”, indica Claudio García, gerente comercial de Indisa.
Por último, en el plano de las recetas médicas, el Ministerio de Salud convocó una consulta pública para establecer parámetros técnicos para el uso de recetas médicas electrónicas. En Recemed cuentan con un sistema para enrolar a un médico y validar su identidad como prescriptor de forma directa en la página web de Recemed o a través de una institución, la receta se envía vía correo electrónico al paciente.