Investigadores de Canadá y Australia revisaron una década de literatura existente sobre los entrenamientos en intervalos de alta intensidad (HIIT), donde los entrenamientos HITT de baja intensidad (duran 20 minutos, con menos de 15 minutos de ejercicios de alta intensidad, incluidos el calentamiento y enfriamiento) entregan resultados interesantes.
Este nuevo estudio publicado en el Journal of Physiology, descubrió que los ejercicios HIIT de bajo volumen entrega mejoras comparables, en relación con la salud metabólica, la función cardíaca y la salud arterial, a pesar de que requiere mucho menos tiempo y energía.
“Los hallazgos de ensayos recientes sugieren que el HIIT de bajo volumen puede inducir mejoras similares, y en ocasiones mayores, en la aptitud cardiorrespiratoria, el control de la glucosa, la presión arterial y la función cardíaca en comparación con las formas más tradicionales de entrenamiento con ejercicios aeróbicos, incluido el HIIT de alto volumen y Entrenamiento continuo de intensidad moderada”, indican los autores.
El estudio de metaanálisis no solo entrega una información útil para las personas que poseen poco tiempo para ejercitarse, sino que también para aquellos que sufren problemas de salud o alguna capacidad comprometida para la actividad física.
La Organización mundial de la Salud (OMS) recomienda que los adultos realicen entre 150 a 300 minutos de ejercicio moderado, o de 75 a 100 minutos de ejercicio vigoroso a la semana para así mantener su salud física.
“Si bien las pautas de la OMS pueden cumplir su propósito a nivel poblacional, las intervenciones HIIT de bajo volumen individualizadas y adaptadas realizadas por profesionales del ejercicio debidamente capacitados pueden ser más efectivas a nivel individual, especialmente para personas con poco tiempo”, señaló el Dr. Angelo Sabag, autor del estudio.
Los investigadores advierten que aún faltan estudios que precisen los mecanismos acción que mejoran los índices metabólicos, sin embargo, la evidencia sugiere que “las mejoras metabólicas parecen estar impulsadas, en parte, por una función mitocondrial mejorada y una sensibilidad a la insulina, mientras que ciertas mejoras cardiovasculares están relacionadas con una mayor función del ventrículo izquierdo, así como una mayor función arterial central y periférica cumplimiento”.