A lo largo de la pandemia, distintas voces han advertido sobre los problemas de salud mental que está experimentando el personal de salud producto de la contingencia sanitaria. El Colegio Médico, la Universidad de Chile, la Universidad Católica, la Universidad Central y la Universidad de O’Higgins, lideraron en el país un estudio internacional para levantar información sobre este tema.
La investigación reveló que «un tercio de trabajadores y trabajadoras de salud presentaba síntomas depresivos e incluso una proporción similar a ese tercio podría eventualmente cumplir criterios de algún trastorno mental común, como depresión, ansiedad, y además, más de un 1% de nuestra muestra tenía ideación suicida, número que es considerable», expuso Gonzalo Cuadra, integrante de la Comisión de Salud de la orden gremial.
Los datos recogidos corresponden a la primera ola (2020) y aún no se realiza una evaluación sobre los últimos meses, donde el colapso sanitario ha sido mayor a la del año pasado. El Dr. González advirtió que actualmente «estamos en el punto más álgido de la pandemia luego de un gran desgaste», con «una proporción relevante de trabajadores que postergaron sus vacaciones, no se pudieron tomar días administrativos y han enfrentado una demanda creciente de trabajo».
Dado los resultados y el evidente desgaste emocional, mental y físico del personal sanitario, el Colmed pide una intervención estructural en la red sanitaria solicitando que los trabajadores no se desempeñen por más de 44 horas semanales, considerando que hay quienes ya están sobrepasándolas, además de otras medidas.
El medio radial Cooperativa, informó que en los centros médicos de regiones se ha registrado un aumento en el ausentismo laboral, alcanzando un 20%. Estas se registran, principalmente, por licencias médicas y solicitud de vacaciones. Sin embargo, no existen cifras oficiales que consoliden esta situación.
Desde la Región del Maule, el doctor Carlos Tohá, secretario del Colegio Médico local, apuntó que «el ausentismo por licencias médicas se ha mantenido más o menos de forma estable desde enero, entre un 20% a 30%, pero estos valores son en el sistema público; lo que es el sistema privado de salud puede llegar incluso a superar el 30%».
Desde Tarapacá, el secretario del Colmed Iquique, Roberto Gálvez, argumentó que «el cambio en las formas de trabajo ha llevado a un estrés que ha calado notablemente a nuestros funcionarios. Alrededor del 20% de los funcionarios del hospital han estado o están actualmente con licencia médica por este motivo».
En el Biobío, el doctor Javier Salas, kinesiólogo de la Unidad de Pacientes Críticos del Hospital de Concepción, sostuvo que «estamos todos cansados y frustrados. Pero entramos motivados esperando qué nos depara el día, tratando de darle descanso a la gente e ir rotándola”. Para controlar esta situación, el recinto médico a integrado a nuevos profesionales para dar descaso a otros.