El 8 de julio de este año, la Universidad de Antofagasta creó el Centro de Investigación en Inmunología y Biotecnología Biomédica (CIIBBA), iniciativa que tiene como fin generar un centro de excelencia en inmunología y biotecnología biomédica, fortaleciendo la investigación en la macrozona norte del país.
Este centro se enmarca en la creación del Atacama Desert Vaccine Laboratory, el cual recibió en 2017 fondos del proyecto FIC-R (Fondo de Innovación para la Competitividad Regional) por el CORE de la II región y se enfoca en el desarrollo de investigación en vacunas en Antofagasta.
A parte de contar con investigadores de la Universidad de Antofagasta, este centro también reúne a expertos de la Pontificia Universidad Católica de Chile, de la Universidad de Chile y del Instituto Milenio en Inmunología e Inmunoterapia (IMII).
“Cuando creamos el laboratorio, era un proyecto bastante grande con más de 1000 millones de pesos y queríamos darle una continuidad albergando el laboratorio en un centro de investigación en esta área. Así nace el CIIBBA, el cual ya estaba pensado antes de la pandemia”, destaca su directora, la Dra. Margarita Lay, académica del Depto. de Biotecnología de la Facultad de Ciencias del Mar y Recursos Biológicos de la Universidad de Antofagasta e investigadora adjunta del IMII.
¿Por qué antes de la pandemia ya pensaban ustedes en la necesidad de tener un centro que desarrollara vacunas e investigación en inmunología y biotecnología biomédica?
La idea de este proyecto y el laboratorio era para prepararse ante una posible pandemia, así que ya lo teníamos visualizado desde antes que ocurriese la presente causada por el SARS-CoV-2. Es importante estar preparado para este tipo de eventualidades, pues nuestra salud se expone a estos eventos de la naturaleza cada cierto tiempo. Por ello, es fundamental tener las capacidades para poder desarrollar rápidamente vacunas que se puedan adaptar y tenerlas disponibles para que puedan proteger a la población local.
Además, hay varios virus circulantes en el país que generan enfermedades cada año, como el virus de la influenza o el norovirus humano, este último causante de la gastroenteritis aguda y que es altamente prevalente . Considerando aquello, se pensó este proyecto para que se puedan desarrollar vacunas que puedan abordar estos desafío.
¿Cómo el centro aporta a la investigación en el país?
En todo el norte de Chile, desde Arica a Coquimbo, no existe ningún centro con estas características. Este sería el primer centro en el norte de Chile en que se estudia virología, microbiología, inmunología y biotecnología biomédica. Para ello el CIIBBA reúne a varios académicos expertos en estas áreas quienes pertenecen a las Facultades de Ciencias del Mar y Recursos Biológicos y de Ciencias de la Salud de la Universidad de Antofagasta, como también académicos de las otras instituciones nacionales, anteriormente mencionadas.
De esta forma, la creación del CIIBBA aporta a la descentralización de la investigación, fortaleciendo a su vez la formación de capital humano avanzado en la región de Antofagasta. Uno de los problemas que se ha presentado al no existir un centro de estas características en el norte de Chile, es que ha habido una fuga de talentos hacia el sur, ya sea hacia la Región Metropolitana o hacia la Región del Biobío. Este centro tiene como uno de sus objetivos principales de ser una plataforma para formar estudiantes e investigadores/as locales, como también de otras partes del país y de fuera de éste. Por lo que se espera que el CIIBBA se convierta en una plataforma vinculante y un polo de atracción de talentos nacionales e internacionales, evitando así la fuga de talentos de nuestro norte.
¿Cuáles son las líneas de investigación del CIIBBA?
El CIIBBA tiene cuatro líneas de investigación. En primer lugar, está el desarrollo de vacunas, terapias y métodos de detección tanto para patógenos humanos virales como bacteriales. Una segunda línea es el estudio de la respuesta inmune a infecciones virales, como bacterianas. La tercera línea de investigación es sobre el estudio de enfermedades parasitarias y la cuarta línea es la identificación, caracterización de marcadores moleculares y blancos terapéuticos para enfermedades no infecciosas como el cáncer.
¿Qué desafíos cree usted que debe enfrenar este centro?
El desafío principal es levantar financiamiento para poder desarrollar las diferentes líneas de investigación del CIIBBA. Como centro de I+D+i, primero se va a requerir financiamiento para tener la infraestructura adecuada, por lo que en una primera etapa se postulará a un FNDR de la Región de Antofagasta. Además, se necesitan levantar recursos para poder reclutar recurso humano avanzado, financiar tesis de estudiantes, comprar equipamiento avanzado, como también los insumos y reactivos que se necesitan para realizar los estudios a abordar. Así que, ese es el gran desafío para el CIIBBA. Si se cuenta con el financiamiento adecuado a corto plazo, se podrá avanzar más rápidamente en desarrollar las soluciones biotecnológicas y biomédicas en beneficio de la salud de la población. Esos son los desafíos que tenemos por delante.
Para usted, ¿qué significa liderar este centro de investigación?
Para mí es un bonito desafío y lo hago con mucho entusiasmo. Yo soy del norte de Chile, nací en Arica, de padres nortinos por lo que quiero lo mejor para el desarrollo de la Ciencia en estas latitudes. Además fui la primera Seremi de Ciencia de la Macrozona Norte, lo cual me ayudó a darme cuenta de que el norte de Chile está muy carente de las investigaciones relacionadas a las ciencias biomédicas. Así que, con mi formación como viróloga e inmunóloga tengo mucho entusiasmo de plasmar esos conocimientos y poner en marcha el CIIBBA que ojalá algún día sea un centro de referencia en el norte de Chile para formar nuevos talentos y desarrollar investigaciones de excelencia.