Una encuesta realizada en 2021 por Adecco arrojó que más del 70% de las empresas consultadas cree necesario establecer formas de mejorar la salud mental. A este dato, se suma otro estudio elaborado por Endenred, quienes aseguran que el 76% de los trabajadores buscan tener una dieta equilibrada.
Para lograr un equilibrio de ambas cosas, el método wellness ha surgido como una alternativa atractiva para miles de empresas, dado que ha servido para mejorar la satisfacción y producción laboral. “Esta metodología busca alinear distintas aristas para encontrar la armonía entre las mismas. En la pandemia se hizo más popular y algunas empresas lo empiezan a integrar con miras al bienestar de sus trabajadores”, comenta Leonardo Lagos, director de operaciones biotecnológicas de Careyou, startup enfocada en buscar el bienestar de los trabajadores a través de la digitalización.
“Una de las principales atribuciones del método wellness es la educación nutricional, la cual va enfocada en cambiar hábitos y derribar mitos en cuanto a lo que necesitamos y lo que no para alimentarlos. Todo esto atribuye a una mejor sensación de confort en la calidad de vida y en lo emocional”, declara Catalina Valenzuela, nutricionista.
Complementando este punto, desde la ACHS señalan en su sitio web, que hay que organizar la alimentación según tipo de trabajo. La nutrición para un trabajador que haga labores físicos (mayor consumo de calorías, pero equilibrada) , es muy distinta a la que tenga que estar más tiempo sentado (consumo de frutas y verduras frescas, diversas proteínas y cereales integrales).
Estas prácticas pueden ser llevaderas en la rutina de cualquier persona de manera fácil, pero en el mundo empresarial, desde hace algunos años ya se empezó con la implementación de lo que muchos llaman alimentación del alma. En ese sentido, en 2019, una serie de destacadas empresas fueron reconocidas por establecer prácticas beneficiosas para sus colaboradores, dentro de esas prácticas estaba precisamente el método wellness. Todo esto, entendiendo que el bienestar integral no solo mejora la calidad de vida de las personas, también contribuye en el aspecto laboral donde se puede llegar a ser más productivos.
“Lo óptimo es crear un perfil de calidad de vida de las personas. Un perfil que incluya aspectos nutricionales, de actividad física, y de bienestar. Una vez construido el perfil, el sistema comienza a interactuar con la persona enviando actividades, recordatorios y mensajes multimedias. Todas estas actividades deben ser preparadas y personalizadas por profesionales del área de la salud y actividad física, finaliza el director de operaciones biotecnológicas de Careyou
