¿Alguna vez sentiste un dolor punzante en alguna de tus piernas? Si éste venía acompañado de rojeces en la zona y durezas, entonces lo correcto habría sido dirigirse inmediatamente a un centro médico. ¿Por qué?
Estos síntomas corresponden a una flebitis, una inflamación de la pared de una vena, proceso que, si viene acompañado de un coágulo de sangre o trombo, podría bloquear una o más venas, generalmente en las extremidades inferiores. Este último, la tromboflebitis, hoy se registra como una causa básica de muerte según la Clasificación Estadística Internacional de las Enfermedades y Problemas Relacionados con la Salud (CIE).
Y aunque la formación de coágulos venosos suele presentarse en mayor frecuencia en adultos mayores, también afecta a la población joven. Se estima que un adulto joven presenta esta condición al año, en caso de personas mayores, la incidencia es de dos a tres pacientes por cada mil en el mismo periodo. Se ve una predisposición en el sexo femenino.
“Este problema es bastante frecuente, los síntomas se presentan de forma aguda en el transcurso de horas o un día, la persona empieza a presentar dolor generalmente en las pantorrillas, se ve una zona roja y dura en el trayecto venoso que se logra palpar. También puede traer fiebre si es por una causa infecciosa”, explica el Dr. Ignacio de Asúa, internista de Nueva Clínica Cordillera.
Según el especialista, existen factores que van a predisponer el desarrollo de estas enfermedades. De acuerdo a la triada de Virchow, existen tres elementos clave: daño de un vaso, un lento flujo sanguíneo y un estado de hipercoagulabilidad.
Pero, existen otros factores de riesgo. Si pasas largos periodos inactivo, tienes sobrepeso u obesidad, eres fumador o tienes antecedentes familiares de algún trastorno de coagulación, entonces debes tomar resguardos ya al igual si presentan várices –una causa frecuente de tromboflebitis-, tomas pastillas anticonceptivas o estás embarazada.
El internista de Nueva Clínica Cordillera sostiene que una vez que se realiza el diagnóstico tras estudios que indiquen si corresponde a una flebitis o tromboflebitis, el médico tratante derivará al paciente a un tratamiento que puede abarcar antiinflamatorios comunes y acciones como levantar las piernas, a un tratamiento más complejo acompañado con hospitalización.
“La inflamación superficial es de un curso más benigno. En caso de que haya presencia de un trombo, el tratamiento con medicamentos dependerá de la localización del mismo. Si es mayor a cinco centímetros y está cerca de los vasos más profundo, se debe proceder con autocoagulación similar a una trombosis venosa profunda”, sostiene el Dr. Ignacio de Asúa.
Para prevenir estas enfermedades, las principales recomendaciones es llevar una vida saludable y mantenerte activo. Ahora bien, si vas a viajar o estar sentado por un largo periodo, toma en cuenta los siguientes tips para no aumentar el riesgo de tromboflebitis:
- Camina por el pasillo o donde puedes una vez cada hora, debes moverte.
- Mueve las piernas constantemente flexionando tobillos.
- Bebe abundante agua para evitar la deshidratación.