Cerca de 100 niños y niñas de la región de Valparaíso han recibido con buenos resultados la nueva fórmula desarrollada por el laboratorio Cansino que busca ser una alternativa de inoculación pediátrica “más amigable” contra el Covid-19.
El Hospital Carlos Van Buren es el encargado de esta tarea ya que actualmente se encuentra participando en el estudio de esta nueva vacuna que, a diferencia de las tradicionales, también puede ser inhalada.
El Dr. Miguel Valero, pediatra que colabora en el proyecto, señaló que esta fórmula ya tiene aprobada su seguridad a nivel internacional con estudios previos en adultos y está siendo aplicada tanto en la modalidad inyectable como inhalable.
El profesional detalló que la primera ha generado reacciones similares a las fórmulas tradicionales o de otros laboratorios en un porcentaje menor esperable, mientras que la versión que se inhala prácticamente no ha generado ninguna molestia.
“Con este estudio que llevamos a cabo en el Hospital Van Buren, estamos evaluando algunos ítems de la vacuna pediátrica Cansino, utilizando dos modalidades de aplicación, tanto inyectable como inhalable, con el propósito de ver cómo es la respuesta de los niños, en general, cómo ha sido su reacción”, explica.
Resultados preliminares
En el estudio, que han participado niños y niñas entre 6 y 17 años, se ha observado que los efectos al recibir la versión inyectable son muy similares a las vacunas de otros laboratorios o incluso de las que habitualmente se usan.
El especialista hematólogo, Dr. Valero, informó que los menores han presentado “un poco de fiebre, un poco de dolor en el sitio de la punción, pero la verdad que han sido muy bajos, un pequeño porcentaje de niños solamente ha tenido esos efectos”.
En relación a la modalidad inhalable, el médico del hospital porteño aseguró que “prácticamente no ha generado ninguna molestia, ha tenido muy buena respuesta”.
En cuanto a la seguridad de la aplicación de la fórmula, el pediatra sostuvo que “los estudios ya han mostrado que es una vacuna muy efectiva. De hecho, ya fue aprobada por la OMS y también el Instituto de Salud Pública de Chile, quienes han aprobado su utilización en nuestro país, así como está autorizada en otros países”.
Tercera dosis pendiente
El Dr. Valero especificó que el estudio está enfocado en aquellas personas, entre 6 y 17 años, que aún tienen pendiente la tercera dosis.
“Esto significa que ellos debieron haber recibido las dos primeras dosis de la vacuna Sinovac, que fue la que normalmente se aplicó acá y que aún le falta esta tercera dosis, esta es una muy buena opción para entregarles esta vacuna”, dijo.
Controles periódicos
Con respecto al seguimiento de los participantes, el facultativo subrayó que “a los niños les hacemos controles periódicos donde vamos midiendo los anticuerpos y viendo la respuesta”.
“También damos apoyo a los padres frente a cualquier duda, ya sea de la aplicación de la vacuna como, por ejemplo, si más adelante presentan algún síntoma que pueda ser sugerente o no de Covid, para poder ayudarles a hacer el diagnóstico o descartarlo”, anadió.
El oncólogo pediátrico destacó que el seguimiento se realiza en el policlínico cada 15 días y luego cada dos o tres meses, “pero hay una comunicación directa a través de un número de WhatsApp, que es el mismo donde ellos se inscriben y donde pueden hacer las consultas que quieran”.
Fuente: Hospital Carlos Van Buren.
