La Organización Mundial de la Salud (OMS) informó que luego de una serie de consultas con expertos, comenzará a utilizar en sus comunicados el nuevo término “mpox” para referirse a la Viruela del Mono.
Cuando el brote de la enfermedad se expandió a principios de este año, se observó y se informó a la institución sanitaria sobre el lenguaje racista y estigmatizante en línea, en otros entornos y en algunas comunidades.
“En varias reuniones, públicas y privadas, varias personas y países expresaron su preocupación y pidieron a la OMS que propusiera una forma de cambiar el nombre”, señaló uncomunicado de prensa.
Cambio gradual
Las consideraciones para las recomendaciones incluyeron la justificación, la idoneidad científica, el alcance del uso actual, la pronunciabilidad, la usabilidad en diferentes idiomas, la ausencia de referencias geográficas o zoológicas y la facilidad de recuperación de información científica histórica.
Por lo general, la actualización puede demorar varios años, sin embargo, en esta ocasión el proceso fue acelerado, aunque siguiendo los pasos estándar. La OMS indicó que ambos nombres se usarán simultáneamente durante un año mientras se elimina la Viruela del Mono.
Lo anterior se llevará a cabo de esta forma para mitigar las preocupaciones planteadas por los expertos sobre la confusión causada por un cambio de nombre en medio de un brote global.
La asignación de nombres a enfermedades nuevas y, muy excepcionalmente, a enfermedades existentes es responsabilidad de la OMS según la Clasificación Internacional de Enfermedades (CIE) y la Familia de Clasificaciones Internacionales Relacionadas con la Salud de la OMS a través de un proceso consultivo que incluye a los Estados Miembros de la OMS.
La OMS adoptará el término “mpox” en sus comunicaciones y alienta a otros a seguir estas recomendaciones, para minimizar cualquier impacto negativo continuo del nombre actual y de la adopción del nuevo nombre.
Mejores prácticas
La viruela del simio humano recibió su nombre en 1970 (después de que se descubriera el virus que causa la enfermedad en monos cautivos en 1958), antes de la publicación de las mejores prácticas de la OMS para nombrar enfermedades, publicado en 2015.
De acuerdo con estas mejores prácticas, los nuevos nombres de enfermedades deben darse con el objetivo de minimizar el impacto negativo innecesario de los nombres en el comercio, los viajes, el turismo o el bienestar animal, y evitar ofender a cualquier grupo cultural, social, nacional, regional, profesional o étnico.