El Hospital San Juan de Dios (HSJD) llevó a cabo por primera vez en Chile una Pleuroneumonectomía Extendida con Reconstrucción Freno-Pericárdica, cirugía que consiste en la resección completa de un pulmón, ambas hojas pleurales, pericardio y el diafragma del mismo lado, lo que requiere además su reconstrucción.
El Dr. Rubén Valenzuela, jefe del equipo de Cirugía de Tórax a cargo del procedimiento, explicó que la intervención se realizó a un paciente con un mesotelioma pleural, un tipo de cáncer originado en la pleural, membrana que recubre el pulmón y que se asocia a la exposición a asbesto.
“Esta enfermedad es relativamente infrecuente, pero que va en aumento, y que tarda muchos años en manifestarse luego de la exposición a asbesto, periodo que puede ir entre los 12 y 20 años, incluso más. Es altamente letal y, una vez diagnosticada, la sobrevida media no supera los 12 meses”, agregó.
El Dr. Valenzuela aseguró que este tipo de cáncer “es una patología sin un estándar de tratamiento, por lo que la innovación y la búsqueda de nuevas terapias es fundamental en el futuro de la enfermedad”.
Impacto en los pacientes
La Pleuroneumonectomía Extendida no es una intervención de alto volumen, pero sí tiene un gran impacto en los pacientes. De esta manera, destacó el cirujano, “el HSJD se consolida como un centro oncológico de alta complejidad para servir con altos estándares al área Occidente de Santiago”.
“Esperamos hacer unos cuantos casos por año y, eventualmente, considerar la técnica en otros escenarios como ya se hace en otros países en casos de cáncer pulmonar, derrame pleural maligno, etc.”, añade el profesional.
Quimioterapia Hipertérmica
Junto con la cirugía, también se realizó por primera vez en el país, una Quimioterapia Hipertérmica Intrapleural Intraoperatoria (HITHOC por sus siglas en inglés), que corresponde en la administración directa de quimioterapia a la cavidad pleural durante la cirugía.
Esto se realiza “a una alta temperatura, lo que facilita su llegada a los tejidos en forma local, disminuyendo el efecto sistémico de las drogas, mejorando los resultados locales, con el objetivo de lograr mayor sobrevida”, afirmó el Dr. Valenzuela.
En relación a la implementación de esta técnica, el jefe de Cirugía de Tórax mencionó que las discusiones partieron seis meses antes, con el objetivo de encontrar al paciente más adecuado para el primer caso, y lograr obtener todos los insumos necesarios para realizarla.
“La preparación tuvo varios puntos, primero la experiencia colaborativa de los distintos cirujanos de haber estado en centros donde se realiza esta cirugía, que no son tan frecuentes, por lo que obtener un volumen alto es difícil. El equipo anestésico, con su experiencia en un procedimiento abdominal de similares características y lo más difícil fue coordinar que todo estuviera en su momento preciso: insumos, equipo de circulación, intensivo, enfermería, kinesiología, etc.”, puntualizó.
Fuente: Hospital San Juan de Dios