Los beneficios del ejercicio regular en personas con asma

Este 2 de mayo se conmemora el Día Mundial del Asma, enfermedad que según la Organización Mundial de la Salud afecta a más de 300 millones de pacientes con asma en el planeta y está presente en todos los países, independientemente de su grado de desarrollo.

En Chile se calcula que entre el 7% y 10% de la población tiene asma. Y según la última Encuesta Nacional de Salud (ENS) del año 2016-17, se estima una prevalencia asmática cercana al 5,4% basada en el autoreporte.

Tos, dificultad para respirar y sibilancias son síntomas característicos del asma, que varían en intensidad dependiendo de cada caso, pero pueden acentuarse durante la práctica de actividad física.

Sin embargo, contrario a lo que muchos creen, quienes padecen esta enfermedad deben mantener un plan de actividad física ya que, además de mejorar su salud general, puede ayudar a lograr un mejor control de los síntomas y, con ello, una mejor calidad de vida.

La Dra. Laura Mendoza, médica del equipo de Enfermedades Respiratorias de la Clínica Alemana, asegura que si el asma se trata adecuadamente y se encuentra bien controlada se puede hacer ejercicio regularmente, con las correspondientes medidas de precaución.

Además, destaca que un buen ejemplo son los deportistas asmáticos de alto rendimiento, que, si están bien controlados, pueden hacer actividad física sin restricciones.

Deportes recomendados

Los deportes más adecuados son aquellos que no provocan una excesiva presión pectoral y que se practican, idealmente, en espacios cerrados.

“Las artes marciales, la natación y la gimnasia artística son las actividades físicas más recomendadas para personas con asma. Los movimientos cortos y breves permiten estar en forma, y aumentar la masa muscular, pero sin tanta exigencia”, afirma la Dra. Mendoza.

Los ataques de asma son el mayor peligro que pueden experimentar aquellos que padecen esta patología. Realizar deporte sin tomar las medidas preventivas adecuadas puede provocar uno. Esto es debido a que se puede generar una obstrucción bronquial acentuada y que con esto se presente súbita dificultad respiratoria generalmente asociada a sibilancias.

¿Cómo prevenir crisis asmáticas durante la actividad física?

• Evitar momentos y lugares con alta contaminación o exposición al humo.
• No realizar ejercicios que duren más de 6 minutos. Se recomienda practicar intervalos de menor duración.
• Evitar deportes de resistencia o trayectos largos.
• No fumar.
• Mantener un inhalador de emergencia mientras se realiza la actividad deportiva.
• Siempre seguir las indicaciones de terapia inhalatoria controladora que le haya entregado su médico tratante.

Fuente: Clínica Alemana.

Compartir este artículo

Artículos relacionados