Uno de los principales resultados de un proyecto de investigación liderado por el Instituto de Nutrición y Tecnología de los Alimentos (INTA) de la Universidad de Chile fue la formulación de un extracto de piel de cebolla liofilizado, cuyo principio activo posee una potencia antioxidante sin precedentes, capaz de proteger la mucosa intestinal.
La iniciativa de la Agencia Nacional de Investigación y Desarrollo (ANID) fue liderada por la profesora asistente del INTA, Dra. Jocelyn Fuentes García, y ejecutado en el Laboratorio de Antioxidantes del mismo instituto.
Esta investigación permitió desarrollar un producto de origen natural, que aprovecha un desecho agroindustrial, que es altamente estandarizado, para generar un extracto con capacidad para proteger la mucosa intestinal de animales contra el daño oxidativo, inflamatorio y funcional inducido por antiinflamatorios no-esteroidales (AINEs).
Adicionalmente, demostró que no interfiere en la acción antiinflamatoria del fármaco y es inocuo a las dosis en las cuales ejerce la protección de la mucosa intestinal.
Aporte a la salud de las personas
“Este tema es de relevancia, y celebro que estemos en esta etapa final. Tenemos mucha fe, con un futuro muy promisorio de la Profesora Jocelyn Fuente y el tema que desarrolla en el INTA”, afirmó el Dr. Francisco Pérez Bravo, Director del INTA.
Estaban Zapata, jefe del Departamento de Transferencia y Emprendimiento de la Subdirección de Investigación Aplicada de la ANID, resaltó que “este proyecto cumple con su objetivo al descubrir un compuesto con un alto valor científico y nutritivo, que es un aporte a la salud de las personas”.
El proyecto
La Dra. Fuentes detalló el proceso de su investigación en la formación de la benzoil-benzofuranona de quercetina (BZF-Q), presente únicamente en la piel seca de las cebollas amarilla y morada, y en la de chalotas.
Este extracto se administró en bajísimas dosis a animales, siendo capaz de proteger la función de barrera que cumple la mucosa gastrointestinal, impidiendo el paso de toxinas y bacterias al torrente sanguíneo.
La académica comentó que, tanto la formulación como el uso del extracto, se encuentra en proceso de patentamiento ante el Instituto Nacional de Propiedad Industrial.
Además, existen conversaciones con empresas del rubro farmacéutico y alimentario que se encuentran muy interesadas en el desarrollo de nuevos productos en base a la incorporación de este extracto.
Su potencial uso no estaría solo limitado al consumo humano, sino también presenta un gran potencial para el mejoramiento de la salud de animales que también ven afectada su función de barrera intestinal en estados de estrés oxidativo, como son las aves de corral, peces, vacunos, cerdos, entre otros.
Fuente: INTA.