Los síntomas relacionados con la menopausia, como sofocos, sudoración nocturna, cambios en el estado de ánimo, alteraciones del sueño, dolores en las articulaciones y dificultades cognitivas, no solo perjudican la calidad de vida de millones de mujeres, sino que también pueden afectar negativamente en su lugar de trabajo.
Un estudio publicado recientemente Mayo Clinic cuantifica ese costo, que, solo en Estados Unidos, alcanza un total aproximado de $1.800 millones en horas de trabajo perdidas por año y $26.600 millones si se agregan los gastos médicos.
«La conclusión para los empleadores es que existe una necesidad fundamental de abordar este problema para las mujeres en el lugar de trabajo», afirma la Dra. Stephanie Faubion, autora principal y directora de Salud de la Mujer de Mayo Clinic.
Impacto de los síntomas
La menopausia se produce a los 52 años promedio, edad en que las mujeres constituyen una proporción considerable de la fuerza laboral mundial, por lo que, el impacto de los síntomas en el ausentismo laboral, la productividad, el aumento de los costos médicos directos e indirectos y la pérdida de oportunidades de desarrollo profesional son considerables.
Los hallazgos, publicados en la revista Mayo Clinic Proceedings, identificaron una relación entre los síntomas de la menopausia y los resultados laborales adversos, incluida la pérdida de productividad laboral.
Según el artículo, los resultados ponen de manifiesto la necesidad fundamental de mejorar el tratamiento médico administrado a las mujeres y una oportunidad de lograr que el entorno laboral sea más favorable para las mujeres que están atravesando por este proceso.
«Entre las mujeres encuestadas, el 13% tuvo un resultado laboral adverso como consecuencia de los síntomas de la menopausia y aproximadamente el 11% faltó al trabajo debido a estos síntomas», dice la Dra. Faubion.
Tema tabú
La directora asistente de Salud de la Mujer de Mayo Clinic y autora principal del estudio, Ekta Kapoor, señaló que, «además de la complejidad de la experiencia de la menopausia para las mujeres, el tema es un tabú, en particular en el lugar de trabajo, que posiblemente aumenta la carga psicológica de los síntomas».
Por lo general, añade la profesional, “las mujeres tienen miedo a los prejuicios, la discriminación y la estigmatización y, por lo tanto, pueden ser reacias a revelar los síntomas de la menopausia a sus jefes y a otras personas en el lugar de trabajo. Reconocer estas preocupaciones y crear un entorno laboral seguro para que las mujeres hablen de sus necesidades de atención médica puede ayudar a abordar este tema».
La Dra. Faubion resalta que esta investigación “indica la necesidad fundamental de abordar este problema para las mujeres en el lugar de trabajo. Los médicos deben preguntar a las mujeres sobre los síntomas de la menopausia y ofrecer orientación y tratamiento. Además, los empleadores deben crear y aplicar estrategias y políticas en el lugar de trabajo para ayudar a las mujeres a enfrentar esta transición de vida universal».