Los probióticos cada vez juegan un rol más importante en la salud del ser humano y su uso cobra relevancia para mantener en equilibrio la microbiota, que es todo el grupo de bacterias y virus que ayudan a mantener una buena salud, y reforzar la inmunidad y las defensas en el organismo.
En esta época en que los casos de enfermedades respiratorias van al alza en el país, sobre todo en los niños, el Dr. Pedro Gutiérrez-Castrellón, pediatra especialista en cuidados intensivos y PhD en Investigación en Salud de la Universidad Nacional Autónoma de México, explica que el uso de probióticos reduce de manera significativa la duración de síntomas como la fiebre, dolor de garganta y, por lo tanto, la necesidad de ingerir antibióticos.
“Los niños menores de dos años, que tienen un sistema de defensa que va madurando de a poco, tienen frecuentemente infecciones respiratorias, sobre todo cuando van a guarderías o viven en ciudades de mucha contaminación. La clave es ver qué tanto estas infecciones le deterioran la calidad de vida por la fiebre persistente o el dolor de garganta”, plantea.
“Lo que se recomienda cuando eso ocurre, además de un muy buen antiinflamatorio, es no usar antibióticos de forma indiscriminada, porque ocho de cada 10 infecciones son por virus. Entonces, el uso de probióticos es muy importante porque reduce los síntomas y permite que el chico regrese más rápido a la guardería, que los padres vuelvan más rápido a trabajar y eso de una u otra manera repercute en la calidad de vida en términos generales”, agrega.
Aporte de la Vitamina D
El especialista, que fue uno de los líderes de opinión internacionales del Probio Meet, Summit de probióticos 2024, agrega que la Vitamina D también juega un papel relevante al estimular las defensas y la inmunidad.
“Hace mucho tiempo lo sabíamos, pero cada vez más nos damos cuenta que combinada con un buen probiótico puede ayudar a aumentar las defensas y la inmunidad, a reducir las infecciones del oído, garganta, nariz e incluso las infecciones graves. Recomendar el uso de probióticos combinados con Vitamina D, nos puede ayudar a mejorar la calidad de vida y reducir las infecciones”, precisa.
El especialista aclara que no todos los probióticos son lo mismo. “Lo que no se puede hacer es ir a la farmacia y tomar un probiótico cualquiera, porque desafortunadamente ha proliferado el mercado y no todos tienen estudios serios que los soporten”.
“Mi recomendación como médico clínico y como pediatra es que su médico le recomiende los que tengan buenas investigaciones y estudios serios, y los probióticos que pueden ayudar a que dure menos la infección”, manifiesta el doctor Pedro Gutiérrez-Castrellón.