Entumecimiento, pérdida de sensibilidad y hormigueo en las extremidades, además de dolor relacionado con estímulos que no deberían causar dolencias y afecciones a la piel, son algunas de las alarmas que indican una posible neuropatía periférica, que tiene como principal población de riesgo a los adultos mayores.
Se trata de una enfermedad que causa daños en el sistema nervioso periférico, encargado de controlar el movimiento de las extremidades.
El doctor Carlos Quiros, de P&G Health, explica que esta patología “en los adultos mayores suele ser más frecuente ya que, producto del paso de los años, suelen padecer enfermedades crónicas asociadas a la neuropatía periférica, tales como la diabetes, enfermedades autoinmunes como el lupus y la artritis reumatoide y afecciones renales crónicas”.
El especialista añade que “los nervios se ven dañados cuando la capa aislante, conocida como vaina de mielina, se deteriora y ya no cumple su función de recubrir y proteger a los nervios”.
“Este desgaste, que en muchas ocasiones se origina a partir de un déficit del complejo B, en específico de la B12, deja los nervios expuestos a estímulos que antes no representaban mayor problema”, agrefga.
Entre los síntomas típicos de la neuropatía se encuentran:
• Sensación de calor o frío extremo en las extremidades
• Entumecimiento y hormigueo en las extremidades
• Sensación de inflamación en las plantas de los pies
• Dolor a estímulos cotidianos como el roce de las sábanas
• Debilidad muscular
• Afecciones a la piel, por ejemplo, cambio en la coloración y en la textura
• Pie diabético o sensación de tener un calcetín o un guante, que reduce la sensibilidad en dicha zona e incrementa el riesgo de desarrollar infecciones.
En caso de presentar estos síntomas, el llamado es acudir a un especialista para determinar el origen y confirmar el diagnóstico.
El especialista señala que, previo a esta etapa, “es importante suplementar la alimentación con vitaminas que permitan recuperar y mantener el estado del sistema nervioso periférico desde temprana edad, idealmente antes de los 60 años”.
El doctor Quiros remarca que “el secreto para un buen envejecimiento es comer bien, hacer ejercicio, tratar enfermedades a tiempo y evitar factores nocivos que a largo plazo puedan afectar el correcto funcionamiento del Sistema Nervioso Periférico y generar una neuropatía periférica”.