Este miércoles el Gobierno de Argentina anunció que se retirará de la Organización Mundial de Salud (OMS) por tener “profundas diferencias” con el organismo.

Según confirmó durante una conferencia de prensa el portavoz de la Presidencia, Manuel Adorni, fue un pedido del presidente de Argentina, Javier Milei, al canciller argentino, Gerardo Werthein.

“El presidente Milei instruyó al canciller Gerardo Werthein para retirar la participación de la Argentina en la Organización Mundial de Salud. La misma se sustenta en las profundas diferencias respecto a la gestión sanitaria, especialmente durante la pandemia que junto al Gobierno de Alberto Fernández nos llevaron al encierro más largo de la historia de la humanidad, y la falta de independencia frente a la influencia política de algunos estados”, señaló el vocero.

En la misma línea, subrayó que: “Los argentinos no vamos a permitir que un organismo internacional intervenga en nuestra soberanía, mucho menos en nuestra salud”.

Adorni aseguró que la decisión de abandonar la OMS “no representa pérdida de fondos para el país, ni afecta la calidad de los servicios”. Por el contrario, “le da al país mayor flexibilidad para implementar políticas adaptadas al contexto e intereses que requiere la Argentina”.

De esta manera, Javier Milei se alinea con una política impulsada por la administración de Donald Trump llevada a cabo en los Estados Unidos.