Durante años se ha dicho que el polen de las abejas tienen un gran beneficio para la salud. Su alto índice de ácido fólico, las vitaminas del complejo B y minerales como potasio, calcio, yodo, entre otros elementos aportan de forma significativa al organismo. Además, aporta antioxidantes y fuente proteica al tener aminoácidos que se encuentran en lácteos, huevos y carne.
Dado estos antecedentes, investigadores del Instituto Núcleo Milenio de Resonancia Magnética Cardiovascular estudiaron cómo el polen de las abejas podría tener efectos favorables en el hígado dada su alta concentración de compuestos fenólicos y una alta actividad antioxidante.
El estudio reveló que el polen podría reducir daños hepáticos generados por el hígado graso no alcohólico, una de las principales causas de morbilidad y mortalidad en todo el mundo. El alto nivel de antioxidantes ayuda a reducir la cantidad de grasa de las células.
“Nuestros resultados muestran una correlación positiva estadísticamente significativa entre el contenido fenólico total y la capacidad antioxidante. Se evaluó la capacidad de las muestras seleccionadas para revertir la esteatosis en un modelo celular in vitro utilizando células Hepa1-6. Los extractos de polen protegieron a las células Hepa1-6 contra el daño oxidativo provocado por los radicales libres derivados del 2,2?-azo-bis (2-amidinopropano) diclorhidrato (AAPH)”, mencionan los autores del estudio.
Se estima que entre un 10 y un 15% de las personas padecen de esta enfermedad. En la actualidad no existen tratamientos farmacológicos para tratar el hígado graso. Por ello, este estudio podría aportar para el desarrollo de nuevas alterativas terapéuticas que mejoren la salud de las personas.
La investigación liderada por el doctor en Ciencias Médicas e investigador de Núcleo Milenio, Juan Esteban Oyarzún, concluyó que los extractos de polen de abeja tienen la capacidad de “hepatoprotección”, es decir, que el polen protege al órgano produciendo una regeneración celular más rápida gracias al alto índice de antioxidantes.
“En resumen, nuestros resultados apoyan el efecto antioxidante, hepatoprotector y anti-esteatosis del polen de abeja en un modelo in vitro”, aseguran los investigadores.
Gracias a este positivo resultado, los investigadores ya plantean nuevas investigaciones asociadas al polen de abeja. Buscarán qué tipos de reacciones y beneficios tiene el polen en otros órganos como el corazón, ya que también sufre afecciones asociadas a la cantidad de grasa acumulada en el cuerpo, generando un gran desgaste celular.