El pasado viernes 28 de mayo se registró la segunda cifra más alta de toda la pandemia en número de casos: 8.680 nuevos contagiados de COVID, solo superada por el peak reportado el pasado 9 de abril, con 9.171 contagios. En este escenario, ¿cómo volver a implementar camas críticas a un año de la pandemia?, cuando la principal preocupación es contar con capacidad hospitalaria necesaria.
Gabriela Garnham, gerente general de la Asociación de Dispositivos Médicos de Chile, ADIMECH, plantea que, junto con la tecnología médica necesaria para habilitar una cama UCI, es necesario contar con personal de la salud especializado que, después de un año, se encuentra sumamente fatigado y con licencias médicas. “Estamos en un escenario diferente al de hace un año, cuando no se tenía casi información del virus, pero los profesionales de la salud estaban en plena capacidad para afrontar la crisis”, señala la ejecutiva.
Desde ADIMECH, explican que los especialistas clínicos de dispositivos médicos pueden cumplir un rol clave en este momento de reimplementación de camas críticas y servicios de apoyo clínico. “El especialista clínico puede colaborar con el equipo de salud en una rápida implementación y uso de los distintos dispositivos médicos requeridos en el tratamiento de los pacientes Covid-19, que forman parte de una cama UCI, como los ventiladores mecánicos o las máquinas de circulación extracorpórea, por ejemplo”, agrega Gabriela Garnham.
Recordemos que las “Camas UCI” se definen como un espacio que permite un monitoreo estricto de la condición de una persona en estado crítico. “Por ejemplo, si llegan a fallar sus algun órgano vital; poniendo el riesgo la vida de la persona, la cama UCI contempla desde monitores que evalúan el ritmo del corazón, la respiración, la presión sanguínea y la saturación de oxígeno a través de la piel hasta los ventiladores, dispositivos mecánicos que facilitan la respiración usando presión para enviar aire, o una mezcla de gases, hacia los pulmones. Las máquinas de circulación extracopórea, por otro lado, son vitales en la atención de pacientes que presenten falla multisistémica, en los casos graves de COVID-19”, explica la gerente general de ADIMECH.
Sin embargo, y considerando que muchos pacientes no Covid y con otras patologías graves pueden necesitar de una cama crítica, ADIMECH hace también un llamado urgente a la ciudadanía a perseverar en sus esfuerzos de cuidado, evitando las reuniones innecesarias y manteniendo el lavado de manos, la distancia física y el uso de la mascarilla, “porque aún no podemos bajar la guardia”, destacó Gabriela Garnham.
Entre los socios de ADIMECH se encuentran compañías líderes en innovación que fabrican dispositivos médicos, que permiten equipar una cama de cuidados intensivos y los servicios de apoyo clínico requeridos. En este sentido, afirma la representante gremial, la tendencia es “a que las nuevas tecnologías evolucionen rápidamente, siendo menos invasivas para el paciente y con altos estándares de calidad y seguridad”, finaliza.