Una neoyorkina con leucemia es la primera mujer y la tercera persona hasta el momento en curarse del VIH, después de recibir un trasplante de células madre de un donante que era naturalmente resistente al virus, según ha informado Reuters y varios medios estadounidenses.
El caso de esta paciente de mediana edad y de raza mestiza fue anunciado el martes 15 de febrero en la Conferencia sobre Retrovirus e Infecciones Oportunistas (CROI) de Denver, en EE. UU. Se trata además de la primera vez en la que se ha utilizado la sangre del cordón umbilical, un enfoque más novedoso que puede poner el tratamiento a disposición de más personas.
Libre del virus durante 14 meses
Desde que la paciente recibió sangre del cordón umbilical para tratar su leucemia mieloide aguda, ha estado en remisión y libre del virus durante 14 meses, sin necesidad de tratamientos antirretrovirales contra el VIH, indicaron los científicos.
Los dos casos de curación de este virus anteriores se produjeron en varones —uno blanco y otro latino— que habían recibido células madre adultas, que se utilizan con frecuencia en los trasplantes de médula ósea.
“Se trata del tercer caso de curación en este contexto, y el primero en una mujer seropositiva”, declaró Sharon Lewin, presidenta electa de la Sociedad Internacional del Sida, a la agencia de noticias Reuters.
El estudio forma parte de un trabajo más amplio dirigido por las doctoras Yvonne Bryson, de la Universidad de California en Los Ángeles (UCLA), y Deborah Persaud, de la Universidad Johns Hopkins de Baltimore. Su objetivo es hacer un seguimiento de 25 personas con VIH que se someten a un trasplante con células madre extraídas de la sangre del cordón umbilical para el tratamiento del cáncer y otras enfermedades graves.
Mutación genética específica
Este es el estudio más amplio realizado en Estados Unidos de personas que viven con el VIH que habían recibido el mismo tipo de trasplante con sangre para tratar el cáncer y enfermedades graves. Según especifica la BBC, las células trasplantadas que fueron seleccionadas tienen una mutación genética específica, lo que significa que no pueden ser infectadas por el virus del VIH.
Los pacientes del ensayo se sometieron primero a quimioterapia para eliminar las células inmunitarias cancerosas. Luego, los investigadores trasplantaron células madre de individuos con una mutación genética específica por la que carecen de los receptores que utiliza el virus para infectar las células.
El estudio —cuyos resultados no han sido aún publicados en ninguna revista revisada por pares— sugiere que un elemento importante para el éxito es el trasplante de células resistentes al VIH. Es decir, creen que el sistema inmunitario de los receptores puede desarrollar resistencia al VIH.
Lewin advirtió que los trasplantes de médula ósea (utilizados con los dos anteriores pacientes que se curaron) no son una estrategia viable para curar a la mayoría de las personas que con VIH. Sin embargo, señaló la experta, el trabajo “confirma que la cura del VIH es posible y refuerza aún más el uso de la terapia génica como estrategia viable”.