Definitivamente la alopecia es una de las enfermedades más comentadas de la semana, posterior al conflicto ocurrido entre Will Smith y Chris Rock, luego de que este último se burlara de la calvicie de su esposa, Jada Pinkett.
Pero, ¿qué es la alopecia?
La alopecia se define como la pérdida anormal del cabello. Esta puede presentarse en cualquier parte del cuerpo; sin embargo, la más común y notoria suele ser la que afecta al cuero cabelludo, convirtiéndose en un sinónimo de calvicie.
Hay diversos tipos de alopecia, los cuales se diferencian según sus causales. En el caso de Pinkett, su enfermedad es conocida como alopecia areata y tiene su base en un problema autoinmune, por lo cual los médicos suelen recetar el uso de inmunosupresores para reducir la inflamación y atacar la afección desde dentro.
No obstante, la causa más común de alopecia se relaciona con factores hormonales y afecta en mayor cantidad a hombres que a mujeres. Esto debido a que la testosterona, la hormona masculina por excelencia, con el paso del tiempo puede transformarse en dihidrotestosterona (DHT), provocando que los folículos pilosos del cuero cabelludo se atrofien.
Por otro lado, otro origen frecuente y que ha aumentado considerablemente en pandemia, tanto en hombres como en mujeres, es la alopecia por estrés o también llamada efluvio telógeno, que puede provocar la pérdida de más de la mitad del cabello en muy poco tiempo.
¿Qué tratamientos existen para la alopecia?
El dermatólogo tricólogo -especialista en el diagnóstico y tratamiento de todas las patologías que afectan al cuero cabelludo y los folículos pilosos- debe realizar una evaluación endocrinóloga para determinar qué factores inciden en la caída del cabello.
“Según esos resultados se recomienda el tipo de tratamiento. Estos pueden ser: plasma rico en plaquetas, mesoterapia capilar, láser rojo, o terapia con células madre, que suele ser uno de los más solicitados este último tiempo, ya que es un tratamiento innovador y con excelentes resultados”, señala el dermatólogo, tricólogo y especialista en endocrinología de la Clínica SMER, Dr. Hernán Rioseco.
Sumado a aquello, existe el ya conocido implante capilar (FUE) que se lleva a cabo mediante autoinjertos del cuero cabelludo, zona en la cual se encuentran los folículos que jamás se caen genéticamente.
También se puede recomendar el uso de medicamentos orales o de aplicación directa en el cuello cabelludo para estimular el crecimiento del cabello. Todo dependerá de la gravedad de la alopecia y de la adherencia al tratamiento. Ante cualquier duda, se recomienda siempre ser evaluado por un especialista para encontrar el tratamiento más apropiado para cada paciente.