Dos estudios analizarán si el ejercicio puede potenciar la eficacia de la quimioterapia

Dos estudios financiados por el Gobierno de Estados Unidos reclutarán a más de 300 pacientes con cáncer de colon para determinar si el ejercicio aeróbico puede hacer que la quimioterapia sea más tolerable y menos tóxica y evitar que la grasa invada el tejido muscular, un factor que predice la reaparición del cáncer, las enfermedades cardíacas y la muerte.

«Más de la mitad de los pacientes con cáncer de colon tratados con quimioterapia tienen que retrasar el tratamiento o recibir una dosis menor del mismo porque los fármacos tienen muchos efectos secundarios. Es lo que se conoce como toxicidad de la quimioterapia. Creemos que el ejercicio aeróbico permitirá tratar a los pacientes con dosis óptimas de quimioterapia, reducir la incidencia de las toxicidades de la quimioterapia y permitir la curación de más personas», explicó el doctor Justin C. Brown, director del Programa de Metabolismo del Cáncer del Centro de Investigación Biomédica Pennington.

El investigador espera que los resultados del estudio cambien las guías de práctica clínica que reconocen el ejercicio como un tratamiento de apoyo esencial para la quimioterapia.

«Este estudio establecerá el entrenamiento con ejercicios como obligatorio para ofrecer una atención de alta calidad y basada en la evidencia a los supervivientes de cáncer de colon», apuntó.

Un tercio de las personas con cáncer de colon desarrollan miosteatosis, que predice la reaparición del cáncer, las enfermedades cardíacas y la muerte en los supervivientes del cáncer de colon. Entre los adultos mayores, la miosteatosis también predice una fuerza muscular deficiente, la discapacidad que frecuentemente le sigue y una mala calidad de vida.

El ejercicio puede remodelar la composición del músculo esquelético, evitando que la grasa se acumule en los músculos que utilizamos para movernos. El estudio también determinará si el ejercicio mejora la función del músculo esquelético y su capacidad de quemar energía, lo que evita la resistencia a la insulina y la inflamación, que se han relacionado con la obesidad y la diabetes de tipo 2.

El estudio sobre quimioterapia reclutará a más de 200 supervivientes de cáncer de colon en fase II-III de Baton Rouge, Boston y Oakland. El estudio sobre miosteatosis reclutará a más de 130 supervivientes de cáncer de colon en estadio I-III de Luisiana.

 

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