Instituto de Salud Pública advierte sobre los peligros de recolectar y consumir hongos silvestres

El Instituto de Salud Pública (ISP) advirtió a la población sobre los peligros de la recolección e ingesta de hongos silvestres, a propósito del caso de intoxicación aguda de una paciente que fue internada en el Hospital Carlos Van Buren de Valparaíso, el 1 de agosto pasado.

“Como parte de la cultura ancestral y gastronómica es frecuente el consumo de hongos, sin embargo, es necesario que quienes gustan de la naturaleza y los productos silvestres, tengan conciencia que muchas setas pueden ser extremadamente tóxicas”, plantea el ISP mediante un comunicado.

Estos hongos venenosos son difíciles de diferenciar, incluso a veces por personas con una amplia experiencia en ellos.

Mirtha Parada, jefa de la Unidad de Régimen de Control Sanitario y Medicinas Complementarias del ISP remarcó que “es importante conocer bien las especies para distinguir que puede ser consumido o no”.

“Los hongos venenosos se clasifican en diferentes grupos, de acuerdo al grado de toxicidad y tiempo de aparición de los síntomas, entre los cuales se describen: trastornos gastrointestinales, alteraciones nerviosas, trastornos vasculares, hasta intoxicaciones graves con síntomas tardíos y muerte”, advirtió la profesional.

Toxinas intactas

En Chile, desde 1935 se han descrito intoxicaciones por consumo de hongos venenosos, algunas con consecuencias fatales para los afectados.

En las bases de datos de defunciones del Departamento de Estadísticas e información de Salud (DEIS) del Minsal, entre 1999 y 2020 se reportan siete casos de muerte por consumo de hongos comestibles, casi siempre en estación invernal y en regiones del sur de Chile y Santiago.

Para evitar complicaciones que afecten la salud, el ISP recomienda “conocer las especies a cabalidad, además de tener presente que si bien existen animales que se alimentan de hongos venenosos, eso no significa que éstos sean inocuos para el ser humano”.

“Los hongos cocinados, hervidos o conservados en sal o vinagre mantienen sus toxinas intactas”, resalta el organismo.

Para finalizar, el ISP enfatiza que “la creencia en que lo natural es inocuo o terapéutico es errónea”.

“Por lo tanto, la única alternativa segura es que los hongos a consumir sean extraídos y vendidos en lugares autorizados, ya que en estos casos se siguen procedimientos de control y vigilancia de los alimentos, lo que asegura que las especies comestibles sean seguras para el consumo humano”, sentencia.

El Ministerio de Salud está trabajando en propuestas de modificaciones normativas al Reglamento Sanitario de los Alimentos – RSA DS N°977/96, referido a hongos comestibles.

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