Enfermedades exantemáticas: ¿Cuáles son las pestes infantiles más comunes en Chile?

Las enfermedades exantemáticas, o comúnmente conocidas como “pestes”, son un grupo de patologías, generalmente infecciosas, que se caracterizan por manifestarse a través de una erupción cutánea.

El Dr. Jaime Herrera, pediatra de Clínica Las Condes, asegura que los niños y niñas tienen una mayor probabilidad de contagiarse, aunque también pueden afectar a los adultos, con efectos incluso más severos.

“Estas son enfermedades contagiosas que se presentan habitualmente en la edad infantil. Se caracterizan por presentar manchas o lesiones en la piel. Son de etiología infecciosa, la mayoría de origen viral, pero hay algunas causadas por bacterias”, explica.

El especialista señala que las enfermedades exantemáticas de la infancia son por lo general muy contagiosas y su transmisión es de persona a persona a través de la vía respiratoria, mediante la saliva, las secreciones nasales o en el caso de las vesiculosas, directamente al tocar el líquido (exudado) de las ampollas.

Pestes frecuentes en la niñez

El Dr. Herrera indica que, “es muy importante que los padres cumplan con el calendario de vacunación del Minsal y sigan la recomendación de su pediatra respecto a refuerzo de vacunas y vacunas adicionales”.

Además, agrega el pediatra, “hay que recordar que si bien es cierto la mayoría son benignas, pueden complicarse y alguna requiera tratamiento antibiótico”.

• Varicela

Es causada por el virus de la varicela-zóster (VVZ). La lesión inicial es una mancha roja que luego evoluciona a una ampolla, la que a los 2 días se rompe generando una costra. La mayoría de los casos son leves y de evolución benigna en los infantes, sin embargo, en adolescentes, adultos y pacientes crónicos con tratamiento inmunosupresor (corticoide) puede ser grave, requiriendo tratamiento antiviral e incluso hospitalización.

Existe una vacuna para prevenir su contagio y se contempla en el calendario de vacunación de niños nacidos a partir del año 2019. Consiste en una vacuna de dos dosis, una administrada a los 18 meses y luego a los 36 meses de edad.

• Rubéola

Es una enfermedad que se puede presentar en forma muy leve, en ocasiones con fiebre baja, y mínimo malestar en general. Las lesiones de la piel son tenues, pequeñas manchas rosadas generalizadas y ganglios inflamados en la región de la nuca.

El mayor riesgo de esta enfermedad es cuando el virus de la rubéola infecta a una mujer embarazada en sus primeras etapas, puesto que la probabilidad de transmitir el virus al feto es del 90%. Esto puede causar anomalías congénitas e incluso la muerte.

En Chile, para prevenir su aparición, se administra la vacuna contra la rubéola como una combinación a la de sarampión, paperas y rubéola (tres vírica) a los 12 y 36 meses.

• Sarampión

Es una enfermedad vírica muy contagiosa que se transmite por partículas procedentes de la nariz, boca y faringe de las personas infectadas. Sus síntomas suelen ser fiebre alta, rinorrea, tos, ojos rojos y llorosos, pequeñas manchas blancas en la cara interna de las mejillas, y erupción generalizada en todo el cuerpo.

Si bien, esta enfermedad es poco frecuente gracias a las altas tasas de vacunación, en algunos casos el sarampión puede causar complicaciones graves de salud, tales como ceguera, encefalitis, diarrea intensa, infecciones del oído y neumonía, sobre todo en pacientes inmunodeprimidos.

Tal como la rubéola, se previene través de la inoculación de la vacuna tres vírica a los 12 y 36 meses de edad.

• Escarlatina

Es una enfermedad bacteriana producida por un grupo de bacterias llamado estreptococos del grupo A que es la misma bacteria de la amigdalitis purulenta. Se contagia por la vía respiratoria y produce inflamación en la garganta.

Esta bacteria produce una toxina que se manifiesta en la piel y que se conoce como escarlatina. A diferencia de las pestes anteriores, su tratamiento es con antibióticos y por lo mismo no tiene mayores complicaciones.

• Exantema súbito

Es una enfermedad viral benigna que afecta mayoritariamente a recién nacidos y niños pequeños. También se conoce como la sexta enfermedad o roséola. Es causada por el virus del herpes humano tipo 6 y tipo 7.

Entre sus síntomas característicos, está la fiebre alta durante 3 a 5 días sin otros síntomas relevantes, al ceder la fiebre aparecen en forma súbita las erupciones de color rosado en todo el cuerpo. Aunque no se puede prevenir, es fundamental el manejo y control adecuado de la fiebre.

• Eritema infeccioso

Esta enfermedad es causada por el parvovirus humano B19. Afecta con frecuencia a los niños en edad escolar. Se caracteriza por la aparición de un exantema rojo en las mejillas, que posteriormente puede extenderse a las extremidades.

Estas manchas pueden aparecer, desaparecer súbitamente. No hay tratamiento para esta patología, que desaparece en algunas semanas. Las complicaciones son muy poco frecuentes. Las recomendaciones son mantener el reposo y manejo de la fiebre.

• Otros exantemas no clásicos

Existe un grupo de pestes o enfermedades exantemáticas que no corresponden a las pestes clásicas y que se manifiestan en niños durante o finalizada una enfermedad viral.

Fuente: Clínica Las Condes.

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