El Hospital Carlos van Buren recibió a un paciente pediátrico de dos años con una profunda quemadura por fuego que cubrió el 30% de superficie de su cuerpo, ante la complejidad del caso, sumado a las pérdidas que sufrió el Banco de Tejidos del Hospital San Borja Arriarán, afectado por un incendio el año pasado, los especialistas buscaron distintas opciones para su manejo, de esa forma, lograron obtener desde el centro hospitalario nortino, piel de donante vivo que fue sometida a una cirugía de abdominoplastía.